alguna mala cara? siempre me ha dado cosa subir la bici al metro, así que siempre encontraba donde estacionarla afuera y encomendarla a Malanya, dios de los caballos.
Ningún problema, quizás como hice el viaje temprano y no habia mucha gente no tuve drama con usar los ascensores y el funcionario de metro no tuvo problema en abrir la puerta lateral una vez que hube validado mi pasaje (después caché que habia una puerta para sillas de ruedas que podria haber usado xd).
Recuerda eso si que solo los domingos está permitido viajar con bici tradicional en metro. En la semana creo que solo podrías entrar con una plegable.